Esta entrada esta dedicada a la tercera revolución industrial, uno de los cinco pilares de Jeremy Rifkin es la transformación de los edificios o viviendas en pequeñas centrales electricas, y yo elegí enfocarme en este punto ya que me interesó mucho. Buscando información sobre viviendas autosustentables encontré esta información y quiero compartirlo porque es muy interesante ya que se demuestra que no solamente se puede producir energia a partir de la luz solar. La tierra con sus nutrientes y bacterias, tambien reune el potencial para extraer energía mas allá de la energía renovable producida a partir de las cualidades del subsuelo y de la condensación de calor.
http://www.tuverde.com/2014/03/un-panel-bio-fotovoltaico-genera-energia-con-%C2%A1bacterias/#comments
Las investigaciones y el diseño aplicado a la generación de energías limpias no se detienen. Esto lo demuestra un nuevo panel desarrollado por especialistas del Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña que tiene la singular capacidad de extraer energía de las bacterias que habitan en la tierra.
Seguramente te estés preguntando cómo se logra esto. En blog ADN lo explican: “Como las bacterias se alimentan a través de los subproductos de la fotosíntesis de las plantas, mediante la introducción de un ánodo y un cátodo en el suelo, los electrones libres pueden ser extraídos y puestos en un circuito con un condensador o un convertidor. Esto permite utilizar el flujo de energía para alimentar aparatos o cualquier otro dispositivo eléctrico”. Complejo, ¿no te parece?
Más allá de su funcionamiento, lo que es fundamental entender es que este panel bio-fotovoltaico podría ser distribuido en zonas con poca o nula red eléctrica. No importa el lugar, siempre y cuando existan plantas, incluso un cactus sirve.
El patrón seguido en la construcción de este ingenioso panel de tres niveles con diferentes tamaños fue el teslado, que surge de cubrir un plano con polígonos regulares. El tejido de celdas resultante da lugar a que se incorporen las baterías, al tiempo que se le da a las plantas mayor volumen para desplegar sus raíces.
La buena noticia es que la puesta a punto de un panel como este no resulta cara; la mala es que se necesitarían muchísimas plantas para alimentar un hogar entero. El desafío de los diseñadores es mejorar este último punto.
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